
En medio de una creciente tensión migratoria en Washington D.C., diversas organizaciones comunitarias han establecido redes de alerta para informar a los inmigrantes sobre los operativos del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE). Estos avisos han levantado interrogantes sobre cómo los activistas obtienen información anticipada de las redadas, lo que ha impulsado una investigación interna en las agencias de seguridad.
We have identified criminal leakers within @DHSGov and are preparing to refer these perpetrators to the @DOJ for felony prosecutions.
— Kristi Noem (@KristiNoem) March 7, 2025
These individuals face up to 10 years in federal prison.
We will find and root out all leakers. They will face prison time & we will get justice… pic.twitter.com/KEtpJDtUNs
Investigación del Departamento de Seguridad Nacional
Según reportes de Univision, autoridades han confirmado que dos agentes gubernamentales están bajo proceso por presuntamente filtrar datos de los operativos migratorios. Ante esta situación, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha implementado pruebas con detectores de mentiras para identificar posibles filtraciones entre sus empleados. Aunque el número exacto de personas sometidas a estas pruebas no se ha divulgado, el DHS ha enfatizado su compromiso con la seguridad de la información.
Desde el inicio del año, la administración de Donald Trump ha intensificado sus acciones contra la inmigración irregular, en línea con su promesa de campaña de fortalecer las deportaciones. Recientemente, la Secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, advirtió que los empleados que divulguen información confidencial podrían enfrentar penas de hasta 10 años de prisión y serán procesados judicialmente.
Estrategias de los activistas y respuesta policial
Por otro lado, los grupos de activistas sostienen que sus alertas no provienen de filtraciones gubernamentales, sino de una estrategia de vigilancia ciudadana. Explican que realizan recorridos en comunidades vulnerables para detectar los movimientos de ICE. Una vez confirmada la presencia de agentes, utilizan redes sociales y contactos comunitarios para advertir a los migrantes sobre posibles redadas.
La respuesta de las autoridades no se ha hecho esperar. En algunos operativos recientes, la policía ha restringido el acceso a los activistas, cerrando calles y limitando su capacidad de observación. A pesar de estos desafíos, las organizaciones continúan operando amparadas en normativas locales que limitan la colaboración con ICE, reafirmando su compromiso de proteger a las comunidades en riesgo.
¿Cómo operan las redes de alerta migratoria?
Las redes de alerta migratoria operan mediante la vigilancia ciudadana, donde activistas monitorean los movimientos de ICE en comunidades vulnerables y difunden avisos a través de redes sociales y contactos locales.
¿Qué consecuencias enfrentan los agentes que filtran información?
Los agentes gubernamentales que filtran información sobre operativos migratorios pueden enfrentar penas de hasta 10 años de prisión y ser llevados ante la justicia, según las advertencias del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
¿Las normativas locales protegen a los activistas?
Sí, en algunos casos, las normativas locales limitan la colaboración de la policía con ICE, lo que permite a los activistas seguir trabajando en la protección de las comunidades en riesgo a pesar de las restricciones impuestas durante los operativos.