Condado de Rockdale, GA – La tarde del domingo 29 de septiembre se reavivó un incendio en las instalaciones de BioLab en Conyers, lo que provocó el derrumbe del techo y de varias paredes. El incendio fue causado por una reacción química, según explicó Marian McDaniel, jefa de bomberos del condado de Rockdale. Aunque el fuego ya ha sido extinguido, las tareas de limpieza continúan en el lugar. La agencia de protección ambiental de los Estados Unidos (EPA) y la división de protección ambiental de Georgia (EPD) están en el sitio para evaluar los riesgos para la salud.
A raíz del incidente, se detectó cloro irritante en el aire emitido desde las instalaciones, lo que llevó a las autoridades a extender indefinidamente una orden de refugio en el lugar para todo el condado de Rockdale. Hasta el momento, aproximadamente 17,000 residentes han sido evacuados, y decenas de miles más permanecen bajo esta medida preventiva mientras se realizan estudios de calidad del aire.
El incendio, que comenzó a las 5 a.m. del domingo debido a un mal funcionamiento de los rociadores, provocó que el agua entrara en contacto con una sustancia química reactiva. Esto causó un pequeño fuego que fue inicialmente controlado al mediodía, pero se reavivó durante el retiro de productos químicos del edificio. Varias carreteras cercanas, incluidas partes de la Interestatal 20, fueron cerradas temporalmente y permanecen clausuradas mientras la limpieza continúa.
El Hospital Piedmont Rockdale también evacuó a algunos de sus pacientes por precaución. Además, varios establecimientos del condado, incluyendo escuelas y oficinas gubernamentales, cerraron sus puertas. Las autoridades locales han instado a los residentes a permanecer en sus casas, cerrar ventanas y puertas, y evitar el uso de sistemas de ventilación.
BioLab confirmó en un comunicado que todos sus empleados se encuentran a salvo y que la empresa está colaborando estrechamente con los servicios de emergencia para contener la situación. Equipos especializados han sido enviados para reforzar los esfuerzos de remediación, mientras las autoridades trabajan para determinar cuándo los residentes regresen a sus hogares.
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