Olympia, WA – La Legislatura del estado de Washington analiza una nueva propuesta que busca combatir el creciente problema del robo de armas de fuego y los delitos violentos relacionados. El Proyecto de Ley 1152 introduce reglas estrictas para el almacenamiento seguro de armas y penalidades significativas para los propietarios que no cumplan con las medidas establecidas.
La propuesta exige que las pistolas se almacenen en contenedores rígidos cerrados con llave, mientras que rifles y escopetas deberán asegurarse con dispositivos que bloqueen el gatillo en estuches diseñados para ello. Si un arma no asegurada es robada y utilizada en un crimen violento por una persona no autorizada a poseerla, el propietario podría enfrentar multas de hasta $1,000. La situación se agrava cuando alguien resulta herido o pierde la vida por este hecho, lo cual podría resultar en cargos por delitos graves, resultando en penas de prisión y sanciones de hasta $10,000.
Los datos revelan la frecuencia de los robos y sus consecuencias
Datos de la Alianza para la Responsabilidad de las Armas revelan que anualmente más de 4,000 armas son robadas aquí en el estado, aunque muchas no son reportadas. Los promotores del proyecto destacan que estas armas robadas frecuentemente terminan siendo utilizadas en crímenes, subrayando la necesidad de una acción legislativa urgente. Gee Scott, analista y locutor de un programa de radio local, afirmó: “Es hora de tomar medidas drásticas para reducir los delitos violentos. Este proyecto es un paso en la dirección correcta”.
Datos del Departamento de Comercio muestran que la policía de Spokane recibió 882 denuncias de armas robadas entre 2019 y 2022, lo que la sitúa en el tercer puesto entre los departamentos locales del estado. Más de la mitad de estas armas fueron robadas de viviendas, siendo los coches el segundo lugar más común.
¿Qué alegan quienes se oponen?
La propuesta, sin embargo, ha generado debate. Críticos como Jeremy Ball, propietario de un campo de tiro en Spokane, argumentan que estas medidas castigan a los propietarios que también son víctimas de robo. “La solución debería enfocarse en combatir el robo en lugar de penalizar a quienes ya han sufrido un delito”, señaló Ball.
Este proyecto complementa iniciativas previas, como la ley que obliga a reportar armas robadas en un plazo de 24 horas. El resultado del debate en la Legislatura será clave para determinar si estas nuevas reglas logran un equilibrio entre fortalecer la seguridad pública y respetar los derechos de los propietarios de armas en el estado.
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