Condado King, WA – En un fallo histórico, un jurado del condado King ordenó el 15 de enero a Monsanto, adquirida por Bayer en 2018, pagar $100 millones en compensaciones por la exposición a químicos tóxicos en el Centro Educativo Sky Valley, ubicado en Monroe, Washington. Este juicio, que se prolongó durante dos meses, marca un precedente en la lucha legal contra la contaminación por bifenilos policlorados (PCB) en instalaciones escolares.
El veredicto favoreció a cuatro de los quince demandantes que alegaron graves afectaciones de salud, como cáncer, daños neurológicos y problemas de tiroides, derivados de la exposición a PCBs presentes en algunos componentes de las luces flourescentes y algunos de los selladores utilizados en las mismas, los cuales fueron fabricados por Monsanto. Por su parte, Monsanto sostiene que las indemnizaciones son desproporcionadas, y ha anunciado que lo apelará.
Los PCB, químicos fabricados exclusivamente por Monsanto antes de su prohibición en los años 70, se mantuvieron en uso en diversas estructuras, incluido el Centro Sky Valley de Monroe. Informes desde 2007 ya señalaban la contaminación en el edificio, considerado el más deteriorado del distrito escolar. A pesar de las alertas, las autoridades escolares no tomaron acciones concretas hasta casi una década después.
Durante un período de 40 años a partir de la década de 1930, Monsanto fabricó y vendió fluidos aislantes que contenían PCB bajo la marca Aroclor. El líquido se encontró en cientos de lámparas fluorescentes en la escuela Sky Valley en Monroe. Los demandantes en el caso argumentaron que Monsanto sabía desde hacía décadas que los PCB en los fluidos eran tóxicos, pero siguió vendiéndolos de todos modos.
El abogado de los demandantes, Nick Rowley, destacó el fallo como una victoria clave en la protección de comunidades educativas. “Este veredicto expone prácticas de encubrimiento y manipulación científica que permitieron a estos químicos permanecer en las escuelas, poniendo en riesgo a generaciones de estudiantes y docentes”, afirmó.
Este caso, el décimo en relación con los PCB en Sky Valley, refleja un problema de salud pública latente en las escuelas de Estados Unidos. Mientras Bayer enfrenta el desafío de futuras apelaciones, el fallo subraya la urgencia de revisar y eliminar sustancias peligrosas que persisten en entornos escolares, afectando a cientos de familias.
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