Washington D.C: – Las Autoridades investigan una serie de mensajes de texto racistas recibidos por niños, estudiantes universitarios y profesionales de distintos estados tras las recientes elecciones presidenciales. Los mensajes, enviados desde números desconocidos, contienen referencias al pasado esclavista del país y han alarmado a comunidades desde Nueva York hasta California. El FBI, la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) y diversas agencias locales se han movilizado para rastrear el origen de estos textos y proteger a los afectados.
Derrick Johnson, presidente de la NAACP, expresó su preocupación por las implicaciones más amplias de esta situación. Johnson destacó que estos mensajes reflejan un alarmante aumento en la retórica racista y de odio, posiblemente alentada por el ambiente político reciente. “Estos mensajes representan un incremento preocupante de la retórica vil y aborrecible de los grupos racistas de todo el país”, afirmó Johnson en un comunicado.
Varios fiscales generales, tanto demócratas como republicanos, condenaron los mensajes de texto y se comprometieron a llevar a los responsables ante la justicia. La fiscal general de Nueva York, Letitia James, calificó estos mensajes de “repugnantes e inaceptables” y enfatizó su apoyo a las comunidades afectadas. Otros estados, como Luisiana y Ohio, también están trabajando activamente para identificar a los remitentes de los mensajes y proporcionar asistencia a quienes los recibieron.
Las investigaciones preliminares sugieren que algunos de los mensajes fueron enviados a través de la aplicación TextNow, que permite a los usuarios registrarse de forma anónima y utilizar números de teléfono generados al azar. Un portavoz de la compañía afirmó que el equipo de seguridad de TextNow actuó rápidamente para desactivar las cuentas asociadas y está colaborando con las autoridades para prevenir futuros incidentes.
La FCC, encabezada por Jessica Rosenworcel, está tomando en serio el impacto de estos ataques. “Estos mensajes son inaceptables”, declaró Rosenworcel, destacando la importancia de proteger a las personas de cualquier intento de intimidación. Las investigaciones continúan, mientras las autoridades y las comunidades buscan maneras de abordar el daño emocional y psicológico causado por estos mensajes de odio.
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