Condado de Bexar, TX – Las autoridades del sur de Texas han interrumpido una operación de tráfico de personas, rescatando a 26 personas y deteniendo a 7 sospechosos. Según informó el sheriff del condado de Bexar, Javier Salazar, en una conferencia de prensa, las víctimas soportaron «condiciones miserables» durante su viaje y 11 de ellas han sido hospitalizadas.
El grupo fue descubierto en un compartimento falso de un camión y luego trasladado a una casa sin aire acondicionado ni agua corriente. Las autoridades creen que las víctimas fueron transportadas dentro del camión durante al menos tres horas antes de ser llevadas a la residencia, que aparentemente también fue utilizada para peleas de animales. Salazar describió las condiciones como «miserables» y destacó la urgencia de la intervención para evitar una tragedia mayor.
Entre los rescatados se encuentra una mujer de 18 años y una mujer de Guatemala que pagó aproximadamente 16.000 dólares para llegar a ese punto. Las autoridades aún no han identificado los países de origen del resto del grupo. Los hospitalizados sufrieron lesiones relacionadas con el calor y otras condiciones menores. Las temperaturas en San Antonio, donde se encuentra el condado de Bexar, alcanzaron los 102 grados Fahrenheit el día del rescate.
La intervención policial fue posible gracias a información recibida en la mañana del jueves. Los presuntos contrabandistas utilizaban un «remolque largo de cuello de cisne» para transportar a las víctimas. Las autoridades vigilaron el remolque y descubrieron el compartimento falso donde estaban las personas. Salazar indicó que el remolque podía pasar desapercibido incluso al estar cerca, lo que facilitó el movimiento de los contrabandistas sin ser detectados.
Durante el operativo, las autoridades encontraron chalecos antibalas y rifles largos en una residencia trasera, sugiriendo una operación de mayor envergadura. La oficina de aduanas y protección fronteriza de Estados Unidos y otras agencias locales y federales están colaborando en la investigación. Aunque algunos individuos intentaron escapar durante el rescate, Salazar cree que todos han sido contabilizados y pidió a los residentes locales que informen cualquier actividad sospechosa.
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