Washington, D.C. – El departamento de justicia de Estados Unidos se está preparando para ofrecer a Boeing un acuerdo de culpabilidad para resolver un cargo criminal de fraude relacionado con los dos accidentes fatales del avión 737 MAX del fabricante. Los fiscales federales informaron a los abogados de las familias de las víctimas sobre el acuerdo en una reunión celebrada el domingo 30 de junio, según los abogados Paul Cassell y Mark Lindquist.
El acuerdo propuesto incluiría una multa de 244 millones de dólares, una libertad condicional de tres años y la designación de un supervisor independiente para supervisar las mejoras de seguridad y calidad de la empresa. Paul Cassell describió la propuesta como «otro acuerdo ventajoso» que, en su opinión, no responsabiliza adecuadamente a Boeing por los accidentes que resultaron en la muerte de más de 300 personas en 2018 y 2019. Las familias de las víctimas han expresado su descontento con la respuesta del departamento de justicia a los accidentes, considerando que el acuerdo de 2021 permitió que Boeing evitara cargos criminales sin asumir suficiente responsabilidad.
“El recuerdo de los 346 inocentes asesinados por Boeing exige más justicia que esto”, dijo Cassell el domingo. Los cargos penales relacionados con los accidentes del MAX han estado en suspenso durante los últimos tres años y medio. El acuerdo de 2021, conocido como acuerdo de enjuiciamiento diferido, expiró en enero, lo que dio lugar a un plazo de seis meses para que el departamento de justicia determinara si Boeing había cumplido con los términos del acuerdo.
En mayo, el departamento de justicia concluyó que Boeing había violado los términos del acuerdo. Esto permitió a los fiscales federales considerar la presentación de nuevos cargos penales. Sin embargo, hasta ahora no ha quedado claro cómo avanzará el departamento de justicia en este asunto. Tanto el departamento de justicia como Boeing declinaron hacer comentarios el domingo sobre el posible acuerdo.
Según Mark Lindquist, Boeing tiene hasta el final de la semana para aceptar el acuerdo de culpabilidad. Este acuerdo podría poner fin a los cargos criminales pendientes y permitir a la empresa centrarse en implementar las mejoras de seguridad necesarias bajo la supervisión de un supervisor independiente.
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