Olympia, WA – Con el arranque de la temporada de navegación en el estado de Washington, las autoridades de salud están haciendo un llamado a la precaución debido a los riesgos que presentan las bajas temperaturas del agua. Aunque el clima comienza a tornarse más cálido, los cuerpos de agua aún mantienen temperaturas capaces de provocar emergencias médicas, especialmente para quienes nadan sin la preparación adecuada.
El año pasado, al menos 30 personas perdieron la vida en incidentes de ahogamiento que pudieron haberse evitado, según registros de salud pública. En lugares como el Parque Estatal del Lago Sammamish, donde muchas familias se congregan, se observó un esfuerzo de los padres por mantener a los niños cerca de la orilla y fuera del agua profunda.
Expertos en seguridad acuática advierten que la diferencia entre la temperatura del aire y la del agua puede ser peligrosa. El choque térmico, ocasionado por la inmersión repentina en agua fría, puede causar rigidez muscular, dificultar la respiración e incrementar el riesgo de ahogamiento, incluso en nadadores experimentados.
Propietarios de embarcaciones en Bellevue también compartieron su preocupación por los peligros que enfrentan quienes ingresan al agua sin precaución. En la bahía de Meydenbauer, algunos nadadores se atrevieron a sumergirse brevemente, mientras personal del Departamento de Bomberos de Bellevue realizaba entrenamientos de rescate utilizando nuevas motos acuáticas.
Además de resaltar la importancia de la vigilancia, se recordó que evitar el consumo de alcohol es esencial para prevenir accidentes. Las autoridades piden a quienes disfrutan de actividades acuáticas que actúen con responsabilidad, ya que las condiciones actuales del agua seguirán siendo frías durante las próximas semanas.
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