Washington D.C. – A medida que las temperaturas abrasadoras del verano obligan a los estadounidenses a quedarse en casa y millones de personas viajan para vacaciones y reuniones familiares, las infecciones por COVID están aumentando nuevamente, advirtieron el lunes funcionarios de salud de EE.UU.
De acuerdo con los datos emitidos recientemente por los centros para el control y la prevención de enfermedades (CDC) sugieren que una ola de verano de COVID está en marcha, con aumentos en los recuentos de casos en 39 estados y sin disminuciones en ninguna parte del país.
Aunque los CDC ya no rastrean directamente los casos de COVID, utilizan datos de visitas a departamentos de emergencias para estimar la propagación del virus. Tanto las muertes por COVID como las visitas al servicio de urgencias han aumentado en la última semana, mientras que las hospitalizaciones subieron un 25% del 26 de mayo al 1 de junio, según los últimos datos de los CDC. “Parece que la ola de verano está comenzando a iniciar”, dijo el Dr. Thomas Russo, jefe de enfermedades infecciosas de la facultad de medicina y ciencias biomédicas Jacobs de la Universidad de Buffalo, a un medio de comunicación.
El Dr. Dan Barouch, director del centro de virología e investigación de vacunas del centro médico Beth Israel Deaconess en Boston, señaló que varias nuevas variantes de COVID están contribuyendo al aumento de casos en el verano. “Estamos viendo el inicio de un repunte de infecciones que coincide con nuevas variantes que se están desarrollando: KP.2, KP.3 y LB.1. Parece que esas variantes tienen una ventaja sobre las anteriores”, añadió. Estas variantes, descendientes de JN.1, la versión del coronavirus dominante en el invierno, representan una porción significativa de las infecciones actuales.
KP.2 se convirtió en la variante dominante el mes pasado, y luego KP.3 tomó el relevo a principios de junio y junto con KP.1.1, el grupo representa alrededor del 63% de todas las infecciones por COVID en los Estados Unidos, según muestran los datos de los CDC. Mientras tanto, LB.1 representa otro 17.5% de las infecciones y su rápido crecimiento indica que pronto podría convertirse en dominante. Un estudio preliminar publicado este mes sugiere que LB.1 es más infeccioso y podría evadir mejor la protección de vacunas o infecciones previas.
Además de las nuevas variantes, los expertos dijeron que los casos probablemente seguirán aumentando a medida que la gente se refugie en el interior para escapar del calor y se reúna para celebrar el 4 de julio. El Dr. Russo recomendó que las personas vulnerables a infecciones y enfermedades graves, o que tienen más probabilidades de asistir a reuniones grandes, consideren recibir la última vacuna COVID. También mencionó que el fármaco de anticuerpos monoclonales llamado Pemgarda está disponible desde abril para personas inmunodeprimidas y que el antiviral Paxlovid puede reducir la probabilidad de hospitalización o muerte. Para las personas jóvenes y sanas, los expertos sugieren esperar las vacunas COVID actualizadas que se esperan para este otoño.
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