Un mensaje de paz y apertura en la misa de Pentecostés. Crítica del Papa Leo a los nacionalismos políticos
Papa Leo XIV lanzó este domingo un contundente llamado contra el auge de los nacionalismos políticos y su “mentalidad excluyente”, en un mensaje cargado de simbolismo durante la misa de Pentecostés celebrada en la Plaza de San Pedro. Frente a decenas de miles de fieles, el pontífice pidió a Dios que «abra las fronteras, derribe los muros y disipe el odio«.
El papa, primer pontífice estadounidense, afirmó que «no hay espacio para los prejuicios ni para las zonas de seguridad que nos separan de nuestros vecinos«, denunciando el resurgir de actitudes políticas que promueven la división como lo hacen los nacionalismos políticos.
“El Espíritu Santo rompe las barreras y destruye los muros de la indiferencia y el odio”, enfatizó. Según el Papa Leo, la Iglesia debe “abrir las fronteras entre los pueblos y derribar las barreras entre clases y razas”.
Aunque no mencionó países ni líderes concretos, su mensaje se interpretó como una crítica a diversas corrientes políticas actuales. Según The Guardian. Cabe recordar que antes de su elección el pasado 8 de mayo, el entonces cardenal Robert Prevost había expresado opiniones críticas hacia Donald Trump en redes sociales.
Un legado de continuidad con el Papa Francisco
El mensaje de Leo XIV sigue la línea de su predecesor, Papa Francisco, quien también había condenado políticas migratorias restrictivas que a menudo reflejan nacionalismos políticos. Francisco llegó a afirmar en 2016 que «una persona que piensa solo en construir muros, y no puentes, no es cristiana«.
Durante la misa, el Papa Leo recordó también palabras del Papa Francisco en Pentecostés de 2023: “Estamos todos conectados, pero a la vez desconectados, anestesiados por la indiferencia”.
Además, el pontífice clamó contra las guerras que “plagan nuestro mundo”, pidiendo al Espíritu Santo el don de la paz, que comience en los corazones de cada persona y se extienda a las relaciones internacionales, evitando así los efectos de los nacionalismos políticos.
Su llamado a la paz abarcó también conflictos específicos, reiterando su petición de una paz justa en Ucrania y un alto el fuego en Gaza. Según AP.
El Espíritu Santo como fuerza transformadora
Durante su homilía, el Papa Leo XIV subrayó que el Espíritu Santo realiza “algo extraordinario” en la vida de las personas, tal como ocurrió con los apóstoles tras la muerte de Jesús. Esta transformación desafía la noción de nacionalismos políticos ya que “supera sus miedos, rompe sus cadenas internas y los llena de coraje para proclamar la obra de Dios”. Según Vatican News
Citando a Benedicto XVI, el Papa recordó que «el Espíritu abre fronteras«, primero en los corazones de las personas. Es una fuerza que nos ayuda a vencer el egoísmo, el narcisismo y el temor a quienes son diferentes.
“El Espíritu Santo nos desafía, nos lleva a un nuevo modo de vivir y a experimentar la vida desde el amor”, añadió.
La Iglesia, sin fronteras ni divisiones
El Papa también sostuvo que esta transformación debe reflejarse en la propia Iglesia, especialmente frente a los retos que presentan los nacionalismos políticos:
«Somos verdaderamente la Iglesia del Resucitado solo si no hay fronteras ni divisiones entre nosotros; si sabemos dialogar, aceptarnos y reconciliar nuestras diversidades«.
En este contexto, advirtió sobre el peligro de relaciones marcadas por el deseo de dominación y recordó los recientes casos de feminicidio como ejemplos trágicos de ello.
Pentecostés como renovación global
Finalmente, Leo XIV concluyó su homilía invocando al Espíritu: «Que el fuerte viento del Espíritu abra las fronteras de nuestros corazones y nos sostenga en el esfuerzo por construir un mundo donde reine la paz«.
Un mensaje que refuerza el compromiso del pontífice de hacer de su papado un símbolo de unidad y diálogo global. Con este mensaje, el Papa reafirma su rechazo a los nacionalismos políticos que fomentan la división entre los pueblos.»
¿Por qué el Papa Leo critica los nacionalismos?
El pontífice considera que los nacionalismos políticos fomentan el aislamiento, el miedo y la división, valores contrarios al mensaje cristiano de fraternidad y apertura. Esta crítica resalta los peligros inherentes en fomentar políticas divisivas y excluyentes.
¿Qué pidió el Papa durante la misa de Pentecostés?
Pidió a Dios que abra fronteras, derribe muros, disipe el odio, y que el Espíritu Santo traiga paz al mundo y transforme los corazones, alejando así los efectos adversos de los nacionalismos políticos.
¿Cómo continúa el Papa Leo el legado de Francisco?
Retoma el énfasis en la acogida de los migrantes, la condena a políticas excluyentes y el llamado a derribar muros físicos y simbólicos entre los pueblos, destacando aquella línea de crítica hacia los nacionalismos políticos.
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