Washington D.C. – El costo de los huevos en Estados Unidos finalmente dio un ligero respiro a los consumidores en abril, tras meses de incrementos marcados por el brote de la gripe aviar. Según datos del Índice de Precios al Consumidor, el costo promedio de una docena de huevos de grado A se situó en $5.12, una caída considerable en comparación con el récord de $6.23 registrado en marzo. Este descenso representa la primera reducción mensual en el precio de los huevos desde octubre de 2024, marcando un giro significativo en la tendencia al alza.
A pesar de la disminución, los costos siguen siendo elevados. El precio promedio de abril todavía fue un 79% superior al registrado en el mismo mes del año anterior, cuando costaban $2.86 por docena. Esta diferencia se atribuye a la persistencia de la gripe aviar, que ha devastado la producción avícola en el país. Desde 2022, la enfermedad ha causado la muerte de más de 169 millones de aves, afectando drásticamente el suministro. Cada vez que se detecta un brote, las granjas deben sacrificar a todas las aves afectadas, un proceso que retrasa la recuperación del inventario de animales, lo cual prolonga el impacto en el mercado.
En supermercados locales como QFC en Lynnwood, Washington, el precio de los huevos refleja esta realidad: una docena de huevos orgánicos de Vital Farms cuesta $10.49, mientras que un paquete de 18 huevos de marcas como Pete & Gerry’s o Nellie’s ronda entre $9.99 y $10.49, dependiendo de la disponibilidad. Incluso opciones más convencionales, como los huevos extra grandes sin jaula de marca QFC, superan los $6.60 por docena. Esto evidencia que, si bien hay una tendencia a la baja a nivel nacional, el impacto aún se siente de forma significativa en el mercado local.
Para contrarrestar esta situación, la administración Trump impulsó en febrero un plan de apoyo destinado a reforzar la bioseguridad en las granjas avícolas. A través del Departamento de Agricultura, se asignaron mil millones de dólares con el fin de evitar nuevos contagios y estabilizar la producción. Además, Estados Unidos ha incrementado sus importaciones de huevos, recurriendo a países como Corea del Sur, Turquía y Brasil para equilibrar la oferta interna. Según el Instituto Agroalimentario de Wells Fargo, las importaciones de huevos y productos derivados aumentaron un 77.5% en el primer trimestre del año en comparación con el mismo periodo del año pasado.
El esfuerzo por estabilizar el mercado también incluyó la intervención del Departamento de Justicia, que abrió una investigación sobre posibles prácticas anticompetitivas en el sector. La empresa Cal-Maine Foods, el mayor productor de huevos en Estados Unidos, está en el centro de las indagaciones. La compañía, responsable de aproximadamente el 20% de la producción nacional, triplicó sus ingresos netos en el último trimestre fiscal, rebasando los $508 millones. Las autoridades buscan determinar si hubo manipulación de precios en medio de la crisis aviar.
El panorama actual sugiere una recuperación parcial en los precios, aunque persisten desafíos en el abastecimiento. Las medidas gubernamentales y el incremento de importaciones podrían aliviar la presión sobre los consumidores en los próximos meses, mientras se monitorean de cerca los efectos de la gripe aviar en la industria avícola.
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