Olympia, WA – Por primera vez en cuatro años, Washington ha logrado reducir los robos de automóviles, registrando una caída del 31% en 2024. Esta tendencia representa un respiro para los ciudadanos, con 12,640 incidentes menos en comparación con 2023. Sin embargo, el estado sigue figurando entre los más afectados del país, ocupando el séptimo lugar en robos per cápita y el quinto en volumen total de delitos, según datos de la Autoridad de Prevención de Robo de Automóviles de Washington (WATPA).
El informe de WATPA atribuye esta mejora a una combinación de estrategias, desde una mayor persecución y procesamiento de criminales hasta el uso de tecnología avanzada como lectores automáticos de matrículas (ALPR). Además, las campañas de concienciación han ayudado a fortalecer la prevención. Pero no todo es motivo de celebración: un fenómeno preocupante ha surgido en paralelo a la reducción general de robos.
El crimen juvenil ha tomado protagonismo en este escenario
Según el informe, el número de jóvenes involucrados en robos de vehículos casi se cuadruplicó entre 2022 y 2023. Muchos de estos delincuentes reincidentes han sido arrestados tras cometer delitos más graves, lo que evidencia una escalada en la peligrosidad de sus actos y genera inquietud entre las autoridades.
Para enfrentar este doble desafío, WATPA ha reforzado su colaboración con la Asociación de Sheriffs y Jefes de Policía de Washington, estableciendo grupos de trabajo especializados en los condados más afectados y asignando 2,7 millones de dólares en subsidios a 45 agencias. Estos fondos están destinados a fortalecer las herramientas tecnológicas y operativas en la lucha contra el robo de vehículos.
A pesar del avance logrado, WATPA advierte que la lucha contra este delito está lejos de terminar. La agencia ya ha anunciado que buscará un aumento en su presupuesto para el periodo 2025-2027, con el objetivo de consolidar la tendencia a la baja en los robos y frenar el preocupante auge del crimen juvenil.
