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El complot iraní para asesinar a Donald Trump

El Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ) anunció el jueves 7 de noviembre que frustró un presunto complot iraní para asesinar al presidente electo Donald Trump. La denuncia penal, presentada en un tribunal federal en Manhattan, acusa a un funcionario anónimo de la Guardia Revolucionaria de Irán de haber planificado el seguimiento y, finalmente, el asesinato de Trump. Además, dos personas fueron arrestadas por su participación en este complot. Este hecho subraya la continua amenaza que ciertos actores internacionales representan para la seguridad nacional.

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Acusaciones y declaraciones del Fiscal General

El fiscal general Merrick Garland señaló que el DOJ ha identificado y acusado a un agente del régimen iraní. Este agente habría coordinado una red criminal con el objetivo de ejecutar el asesinato de Trump y otras figuras críticas del gobierno iraní en territorio estadounidense. Garland declaró firmemente: «El Departamento de Justicia no tolerará los intentos del régimen iraní de poner en peligro al pueblo estadounidense y la seguridad nacional de Estados Unidos». Estas declaraciones resaltan la seriedad con la que el DOJ aborda las amenazas de seguridad interna.

Detalles del complot y los implicados

Farhad Shakeri, un ciudadano iraní actualmente prófugo, es señalado como el organizador del complot. Fue deportado de Estados Unidos en 2008 tras cumplir una condena en prisión. Según las autoridades, a Shakeri se le encargó elaborar un plan para asesinar a Trump y vigilar a otros ciudadanos estadounidenses de origen judío en Nueva York, a cambio de una suma de 500,000 dólares por cada objetivo.

El Departamento de Justicia también arrestó a Carlisle Rivera y Jonathon Loadholt, residentes de Nueva York, acusados de colaborar con Shakeri. El plan incluía el asesinato de un ciudadano estadounidense de origen iraní, quien era un crítico abierto del régimen iraní. Las autoridades aseguran que Rivera y Loadholt pasaron meses vigilando a la persona, conocida como Víctima-1, en diversos lugares, incluyendo la Universidad de Fairfield, con el propósito de ejecutarla a cambio de una promesa de pago de 100,000 dólares. El FBI (Federal Bureau of Investigation) estuvo involucrado en la investigación de este presunto complot, debido a la naturaleza de la amenaza a la seguridad nacional.

Cargos y condenas potenciales

Los tres acusados enfrentan cargos de asesinato a sueldo, conspiración para cometer asesinato a sueldo y conspiración para lavar dinero. Cada uno de estos cargos conlleva posibles condenas de hasta 20 años de prisión. Shakeri también enfrenta cargos adicionales por proporcionar apoyo material a una organización terrorista extranjera y violar sanciones económicas contra Irán, lo que podría añadir más años a su condena. El Departamento del Tesoro de Estados Unidos (U.S. Department of the Treasury) impone y hace cumplir las sanciones económicas que, según se alega, Shakeri violó. El Departamento de Justicia ha confirmado que la investigación continúa para desarticular la red de apoyo iraní en territorio estadounidense y garantizar la seguridad nacional.

¿Quiénes fueron arrestados en relación con el complot?

Carlisle Rivera y Jonathon Loadholt, residentes de Nueva York, fueron arrestados por su presunta colaboración en el complot.

¿Qué cargos enfrentan los acusados?

Los acusados enfrentan cargos de asesinato a sueldo, conspiración para cometer asesinato a sueldo y conspiración para lavar dinero, entre otros.

¿Dónde se presentó la denuncia penal contra los implicados?

La denuncia penal fue presentada en un tribunal federal en Manhattan.

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