Última actualización el 14 de noviembre de 2024
El Paso, TX – Un presunto capo de la droga mexicano sospechoso de inundar Estados Unidos con fentanilo mortal y que evadió a las autoridades durante décadas se encuentra bajo custodia estadounidense después de que aparentemente agentes federales lo atrajeran a través de la frontera.
Ismael “El Mayo” Zambada, de 76 años, presunto cofundador y líder del poderoso cártel de Sinaloa, fue arrestado el jueves 25 de julio, en El Paso, Texas, dijo el fiscal general Merrick Garland en un comunicado.
Otro supuesto líder del cártel, Joaquín Guzmán López, de 38 años, también fue arrestado, dijo Garland. Guzmán es hijo del infame cofundador y ex jefe del cártel Joaquín “El Chapo” Guzmán, de 69 años, quien cumple cadena perpetua en una prisión estadounidense después de haber sido condenado hace cinco años por múltiples cargos. Tanto Zambada como Guzmán López enfrentan varios cargos por presuntamente liderar las operaciones criminales del cártel, incluidas sus “mortíferas redes de fabricación y tráfico de fentanilo”, añadió Garland.
El departamento de justicia ha señalado que el fentanilo es la amenaza de drogas más letal que ha enfrentado Estados Unidos, y la captura de estos líderes del cártel de Sinaloa es un paso crucial en la lucha contra esta crisis. La operación encubierta para atrapar a Zambada engañó al supuesto capo de la droga para que volara a Estados Unidos bajo falsas pretensiones. Zambada y Guzmán López abordaron un avión supuestamente con destino a inspeccionar una propiedad en México, pero al menos uno de los hombres no sabía que se dirigían a Estados Unidos.
Agentes del FBI arrestaron a los dos presuntos capos de la droga después de que aterrizaron en El Paso. “Dos individuos descendieron del avión (…) y fueron detenidos con calma” por agentes federales que los esperaban, dijo un trabajador del aeropuerto de Santa Teresa, cerca de El Paso. Entre los diversos cargos criminales que Zambada enfrenta en Estados Unidos, se encuentra una acusación por un gran jurado del norte de Illinois en 2009. Aunque su paradero no está claro, se ha informado que un avión del Departamento de Justicia de Estados Unidos utilizado con frecuencia para extradiciones viajó desde El Paso y aterrizó en un aeropuerto cerca de Chicago la madrugada del viernes.
La directora de la DEA, Anne Milgram, afirmó que los arrestos de Zambada y Guzmán López atacan “al corazón del cártel que es responsable de la mayoría de las drogas, incluido el fentanilo y la metanfetamina, que matan a estadounidenses de costa a costa”. Las autoridades estadounidenses han buscado la captura de Zambada durante años, y en 2021 aumentaron la recompensa por información que condujera a su arresto a 15 millones de dólares. El director del FBI, Christopher Wray, destacó que Zambada y Guzmán López habían “eludido a la policía durante décadas” y que ahora enfrentarán la justicia en Estados Unidos.
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