El Condado de Spokane, WA, será testigo de un cambio significativo en las aulas el próximo año, ya que las Escuelas Públicas de Spokane implementarán una prohibición generalizada del uso de teléfonos celulares durante el horario de clases. Esta decisión surge de una revisión exhaustiva de la política distrital sobre dispositivos móviles, llevada a cabo por la Junta Escolar de Spokane el miércoles 10 de julio. El objetivo es fomentar un entorno de aprendizaje más concentrado y reducir las distracciones.
Nueva Política de Teléfonos Celulares Busca Límites Saludables
El superintendente Adam Swinyard ha confirmado que el distrito tiene previsto implementar esta propuesta antes del inicio de las clases en septiembre. Nikki Otero Lockwood, presidenta de la junta, subrayó la importancia de esta medida: «Realmente quiero ayudar a la próxima generación tanto como sea posible a tener límites saludables. Al hacer esto, creo que estamos creando límites saludables». Esta iniciativa busca establecer directrices claras para el uso de la tecnología en el ámbito educativo.
Las nuevas regulaciones detallan cuándo los estudiantes de cada nivel educativo podrán usar sus dispositivos móviles en la escuela, con excepciones previstas para emergencias o con la aprobación de un administrador.
Restricciones por Nivel Escolar y Consistencia en la Política
En las escuelas secundarias, los alumnos tendrán prohibido el uso de sus teléfonos celulares en las aulas. Sin embargo, se les permitirá utilizarlos durante el almuerzo, entre períodos de clase y antes o después del horario escolar. A pesar de esto, la junta ha recomendado extender la prohibición también al horario de almuerzo para maximizar la concentración. Para las escuelas primarias, el uso de estos dispositivos se limitará estrictamente a antes y después de la escuela.
La propuesta busca establecer una coherencia uniforme en todo el distrito con respecto a las expectativas sobre el uso de dispositivos móviles, eliminando las variaciones que actualmente existen entre diferentes escuelas y aulas. «Es muy importante que haya coherencia, no solo entre escuelas, sino también dentro de las escuelas, de modo que un maestro no aborde las cosas de una manera y luego otro maestro del otro lado del pasillo haga algo diferente», afirmó el superintendente Swinyard en una conferencia de prensa. Para más detalles sobre las políticas educativas, puedes consultar el Departamento de Educación de EE. UU..
El distrito llevó a cabo una encuesta entre estudiantes, personal y familias para recopilar opiniones sobre el borrador de la política. De aproximadamente 700 estudiantes que respondieron, 170 se mostraron a favor de la restricción, argumentando que los teléfonos eran una distracción para su aprendizaje. La propuesta no solo abarca los teléfonos celulares, sino que también incluye otros dispositivos electrónicos portátiles como dispositivos de juego, relojes inteligentes y cualquier aparato que pueda enviar mensajes, hacer llamadas o reproducir juegos o videos. Adicionalmente, se han establecido procedimientos claros para manejar las infracciones, que van desde simples recordatorios hasta la confiscación del dispositivo y la notificación a los padres. Puedes ver ejemplos de políticas similares en otros distritos en el sitio de la Asociación Nacional de Juntas Escolares.
¿Por qué las Escuelas Públicas de Spokane prohibirán los teléfonos celulares?
La prohibición tiene como objetivo principal reducir las distracciones en el aula y fomentar un entorno de aprendizaje más saludable y concentrado para los estudiantes, estableciendo límites claros en el uso de la tecnología.
¿Qué dispositivos están incluidos en la nueva política, además de los teléfonos celulares?
La política no solo restringe los teléfonos celulares, sino también dispositivos de juego, relojes inteligentes y cualquier dispositivo electrónico portátil capaz de enviar mensajes, hacer llamadas o reproducir juegos o videos.
¿Se permitirán excepciones para el uso de teléfonos celulares en las escuelas?
Sí, se permitirán excepciones para emergencias o con la aprobación expresa de un administrador escolar, garantizando que se cubran situaciones críticas.